Pobrecitos esos guardias imperiales...
...Porque mientras esperan un códex que cada día parece más lejano, les tocó enfrentar Grotescos, y como veremos en un rato, eso es muy malo (para los guardias).
(Encuentre la parte uno de este review aquí)
Las unidades
Vamos a decirlo de frente: todo ha mejorado. Algunas cosas más, otras cosas menos, cada datasheet ha recibido una nueva e inspirada revisión que combinado con las reglas que ya vimos, hacen de este un códex excelente, lleno de potencialidad. Repasemos lo más destacado.
Cuartel General
Por el lado del Arconte, la principal mejora pasa por el hecho de que en un destacamento de Realspace Raiders confiere repetir los 1 para impactar a todas las unidades core de dicho destacamento, lo que es un potenciador importante para las unidades Brujas y Coven -estos en particular no tenían manera de repetir los 1 para impactar antes, así que cuando el Arconte está cerca de ellos, es un hermoso 16,7% más de eficiencia en todos sus impactos.
Las Súcubos, por su parte, ganan dos ataques (se van a 6) y son irrisoriamente baratas para lo mucho que pueden pegar: una de ellas, mejorada a Master Succubus es un auto include. No salga de su casa sin ella. (Y lleve también sus diez amigas de la arena con habilidad de armas 2).
Los Hemónculos ganaron una herida y la capacidad de curar todos los turnos, lo que resulta excelente en el contexto de uso de estos CG, que tienden a acompañar a sus tropas y están más expuestos que otros cg de facciones "fragiles" como los Deldar, y siguen siendo obligatorios cuando vayamos a recurrir a Talos y Wracks por lo mucho que les aportan.
Lelith es... Meh. En los papeles, sus habilidades lucen increíbles, pero en la práctica, pierde contra nuestra súcubo con el rasgo Precision Blows y la reliquia Triptich Whip contra cualquier objetivo que no sea infantería liviana, algo contra lo que los drukhari no tienen ningún problema, y la súcubo es más barata.
En cambio, Drazhar es una picadora de carne de tal calidad que resulta una elección obligada (lastima que la falta de slots de Cuartel General nos impida tomarlo en un destacamento de Realspace Raiders), pero tomarlo en una patrulla con una tropa mínima es una opción muy sólida y en todos los otros casos, tómelo, que no lo defraudará.
Para cerrar el slot, Urien sigue siendo un hemónculo, pero mejor, y en destacamentos de profetas vale siempre la pena, en particular porque la Vexator Mask, la reliquia que tomábamos en un hemónculo común para hacer a las unidades enemigas pelear al último, paso de 6 pulgadas de alcance a 3", y ya no es el auto include que era antes, ya que al ser tan chica se la puede esquivar con facilidad.
Elite
Incubos. Lleve al menos 10. Sino 20. Son así de buenos, y nunca lo van a decepcionar, son el regalo que sigue dando, como los fines de semana largos que terminan un lunes y no solo nos obsequian días extra de descanso, si no que acortan la semana siguiente. ¡Los amamos, fines de semana largos! ¡Y a los íncubos también! (más le vale a GW que los Striking Scorpions Eldar queden parecidos, eh..).
Y donde los chicos de Drazhar son excelentes, la Corte del Arconte no lo es tanto. El principal uso que tienen es impedir que pueda elegirse a los Arcontes como blanco de disparos, pero el meta no pasa por francotiradores en este momento. ¿Saben por donde pasa? Por hacer secundarios de manera segura. Y nadie mejor en ello que las Mandrágoras, cuyo movimiento 8 y su capacidad de pasar a las reservas estratégicas gratis una vez por partida significa que una sola unidad de 75 puntos puede hacer la totalidad de Deploy Scramblers en 4 turnos sin ningún apoyo, al tiempo que aporta para Engage in All Fronts. Una sola unidad, de cinco miembros, y a vivir.
Por su parte, los muchachos que son portada de este artículo, los Grotescos, han quedado excelentes: el cambio de invulnerable a no hay dolor los beneficia, así como también la mejora de alcance en sus "lanzallamas", y ya sea que construyamos Profetas de la Carne, la facción que tiene transhuman limitado o la Coven Dark Technomancers, recurriremos a ellos en nuestras listas.
Tropas de Línea
Todo luce muy bien por aquí también: los Kabalitas ganan un punto de salvación y un ataque extra, lo que los convierte en tropas de relleno que no sentiremos culpa en tomar, y los Wracks siguen siendo absurdamente resistentes para costar 8 puntos cada uno (con un tamaño máximo de unidad de 20, además). Sin embargo, las grandes, gigantescas ganadoras aquí son las Brujas, que han quedado baratísimas, tienen cuatro ataques cada una como mínimo, y en el turno dos ya tienen avanzar y cargar, para una velocidad y potencia destructiva que punto por punto, supera a la de los Arlequines. De hecho, están tan bien que un destacamento de Culto del Conflicto es una gran adición a cualquiera de las otras facciones Aeldari. Por años nos han dicho que los Drukhari son un ejercito "cañón de cristal". Bueno, aquí tienen la parte "Cañón".
Transportes Asignados
Tanto el Venom como el Raider han ganado un asiento extra, lo que permite que transporten una unidad más un personaje, una mejora de calidad de vida que se agradece enormemente, pero el Raider mayor beneficiado aquí, al pasar a resistencia 6 y venir con, por tan solo 85 puntos, una lanza oscura (F8, FP-4, D3+d3), lo que es el mismo precio que un Venom con doble cañón. Esto, sumado a que finalmente tenemos unidades de 10 que vale la pena transportar, significa que serán una vista mucho más común en los campos de batalla a partir de ahora, y que por fin tenemos una facción que puede ir 100% en transportes sin perjudicarse en nada. Solido.
Muy de acuerdo en todo, imagino que esas 3 unidades que no valen para nada son las bestias,tener que llevar un señor de las bestias como peaje se hace demasiado como para pensar en incluirlas.
ResponderEliminarHola Athmadisha! Gracias por pasar!
EliminarLa verdad es que el uso delas bestias era ser baratos, ocupar espacios y mover rápido, pero ahora que usaremos real space raiders ese rol lo hacen mejor los guerreros, y no es que falten unidades rápidas útiles en este libro con los cambios que hubo...
Igual, hermoso libro!